Llegados a este punto y si se han seguido las recomendaciones apuntadas hasta el momento, la organización ya habrá dado algunos pasos importantes, a saber:
- Se sabe qué es un sistema de gestión de calidad según la norma ISO 9001:2000.
- Se tienen conocimientos sobre la gestión basada en procesos.
- Se conocen cuales son las normas de referencia.
- Se ha concienciado oportunamente a todo el personal y todos, incluyendo a la alta dirección, asumen sus responsabilidades.
- Se ha elaborado el procedimiento documentado de control de documentos, que regirá la elaboración del resto de la documentación del sistema.
- Se han determinado los procesos que hoy por hoy se ejecutan en la organización.
- Se han definido mecanismos para conocer el grado de satisfacción del cliente, bien por el registro de las incidencias o bien a través de las encuestas de satisfacción.
- Se conocen los requisitos a cumplir para poder obtener la certificación.
- Se ha nombrado un representante de la dirección o comité de calidad.
- Se ha determinado el alcance del sistema de gestión de calidad, así como las exclusiones.
- Se ha elaborado y aprobado una política de calidad.
Con todo esto, la organización está ya preparada para comenzar el diseño e implantación de su sistema de gestión de calidad. El siguiente paso recomendado es la planificación de los trabajos que aún quedan por hacer.
Estos trabajos aún pendientes son los siguientes:
- Identificar qué procesos son necesarios para completar el sistema de gestión de calidad e Incluir en estos procesos aquellos elementos necesarios para que cumplan los requisitos de la norma de referencia. (Ver apartado 1.5 de este proyecto).
- Documentar aquellos procesos que sean necesarios. (Ver apartado 1.6).
- Determinar unos objetivos de calidad a alcanzar en un periodo más o menos próximo. (Ver apartado 1.7).
- Implantar dichos procesos. (Ver apartado 1.8.1).
- Verificar (auditar) que se cumplen tanto los requisitos requeridos por la norma como los determinados por la organización para asegurar la eficacia de sus procesos. (Ver apartado 1.8.3).
- Revisar el sistema de gestión de calidad para decidir acciones de mejora y para determinar los objetivos de calidad para el siguiente periodo. (Ver apartado 1.8.4).
Es conveniente planificar estas acciones aún pendientes, asignando responsables y estableciendo plazos tope para cada una de las tareas aún pendientes y realizar un seguimiento periódico de las mismas para evitar retrasos y determinar y asignar los recursos necesarios. La hoja de ruta o listado de requisitos mínimos exigidos por la norma, comentada anteriormente en estas páginas, puede ser de gran ayuda en este punto.