La solución a este problema sólo puede ser uno aunque sea drástico; rediseñar el sistema de gestión de la calidad partiendo de un análisis profundo que contemple los siguientes puntos:
- Los procesos de la empresa.
- Las ineficiencias que genera el actual sistema de calidad.
- El sistema de información existente y cómo interactúa con el sistema de calidad y con los procesos de negocio.üConocimiento y motivación de los integrantes de la empresa respecto del sistema de calidad.
- Grado de enfoque al cliente de la organización.
- Gestión de recursos humanos.
Y tras ello, definir un plan de acción que conlleve a que el sistema de gestión de la calidad sea un primer paso para la mejora de los resultados empresariales y que, en muchos casos, acabarán empleando el modelo de la EFQM como herramienta básica para la evaluación de la gestión y sus resultados.Las ventajas de implantar, mantener y mejorar día a día un sistema de gestión de calidad son muchas, entre otras:
- Desde el punto de vista comercial, facilita la penetración en el mercado, mejora la relación calidad-precio como consecuencia de la eliminación de los costes de la no-calidad, y mejora la relación con el cliente por ausencia de devoluciones, mejora de la atención al cliente, etc.
- Desde un punto de vista financiero, mejora la gestión y optimización de los recursos, reduce los costes de la no-calidad haciendo bien las cosas a la primera.
- Desde el punto de vista técnico, mejora los sistemas y procesos de fabricación y permite una mayor integración, definición y compromiso de los proveedores.
- Bajo el punto de vista interno, la implantación de un sistema de gestión de calidad fomenta la implicación del personal en los objetivos de la organización, el trabajo en equipo y la definición de las responsabilidades individuales.
- Disminuye la variabilidad de los procesos por su mayor consistencia y por tanto, las variaciones en la calidad tanto de productos como de servicios.
- Se evitan confusiones al tener documentado lo más importante de cada proceso.
- Surge orden donde había desorden y seguridad donde hubo incertidumbre.
- Las personas que realizan las mismas actividades realizan el trabajo del mismo modo.
- Se concretan las responsabilidades del personal implicado en cualquier aspecto de la calidad, evitando problemas.
- Se controlan los costos de calidad y de no calidad.
- Se mejora el ambiente de trabajo.
Además de la implantación del sistema de gestión de calidad, la certificación del mismo por un organismo independiente asegura todo lo anterior, obteniendo la organización otras ventajas adicionales, como:
- Mejora de la credibilidad técnica de la organización.
- Supone un argumento comercial eficaz.
- Disminuye el número de auditorías internas realizadas por los clientes (1).
(1) Al margen de las auditorías realizadas por la entidad certificadora y de las realizadas por la propia organización, el cliente puede desear realizar él mismo una auditoría a la organización, para verificar de primera mano que se cumplen los requisitos que precisa.